Un superhéroe que suelta diatribas al aire y aristotélicos épicos discursos que por pretensiosos pierden rápidamente su sentido y suelen terminar significando absolutamente nada. Tan fuerte, apasionado y ensimismado que recorre la ciudad saltando entre techos, destrozando la mampostería a cada impulso. Un quijote moderno y enamorado en busca continua de hacer justicia superheroica a toda costa, llevándose todo por delante. A su lado Arthur, un contador retirado que tímido e inseguro, encontrará en un traje de “Hombre Polilla” hallado por azar, una razón de ser. Entre el fuerte y soñador The Tick y el débil y realista Arthur, se generará desde sus denominaciones mismas, una suerte de química de pareja dispareja que siempre es muy interesante de ver. Parodia del genero superheroico, la riqueza de este personaje siempre estuvo en su sentido del absurdo e irreverencia, siempre valientes y carentes de prejuicios.
Hacemos un pequeño recorrido en la historia de este personaje, puesto que es la razón por la cual una nueva serie sobre él genera cierta expectativa y siquiera existe, presentándonos este episodio piloto que justifica la existencia de este artículo.
The Tick surgió en Estados Unidos a principios de los 90’s como un fanzine (léase historieta amateur escrita por un grupo de chicos y distribuida a pulmón en las comiquerías de por ahí) y siempre su leit motiv fue parodiar de la manera más extrema posible el género superheroico, amándolo y burlándose de él por igual. Logrando mucha popularidad en el ámbito del comic convirtiéndose en una publicación de culto, saltó a la masividad gracias su aparición en formato de dibujo animado en la pantalla del canal FOX Kids apenas un par de años después. Siendo un éxito inesperado por lo desconocido del personaje para el gran público, La Garrapata (como lo conocimos en Latinoamérica) se ganó el cariño y fanatismo de un séquito de televidentes gracias a su gran sentido del humor totalmente absurdo, descarado y por sobre todas las cosas: refrescante.
https://www.youtube.com/watch?v=Q6tGVuuQXzA
Jazzero y pegadiso openning de la serie animada de los 90′ ¿ No les suena a las canciones de la película Wiplash?
Tres exitosas temporadas en el aire y un núcleo duro de fieles seguidores darían como resultado dos versiones televisivas más del personaje, esta vez en formato live action. La primera en los tempranos 2000. Siempre con su espíritu a cuestas The Tick aportó mucho sentido del ridículo, pero tan particular, resultó inaccesible para el público adulto de la época, más acostumbrado a que los argumentos sean explícitos acerca del porque pasan las absurdas cosas que pasan (en este sentido los niños son más abiertos al sinsentido y al disfrutar lo antinatural de las cosas, sin cuestionar atisbos de realismo argumental al respecto).
The Tick: la ridícula e incomprendida serie de los tempranos 2000
La serie fue un fracaso que se mantuvo al aire sólo durante una temporada y sorprendentemente una década y monedas después, otra serie live action se intenta posicionar On Demand. Es la pantalla de Amazon (importante competidor de Netflix en Estados Unidos) la encargada de poner al aire un piloto presentado por Ben Edlund, creador y productor de todas las apariciones televisivas anteriores del personaje. El resultado: un episodio que pintando lo que podría ser la serie, nos muestra cosas buenas y malas. Buenas, desde el lado de la ejecución de ciertos elementos que dan cuenta del espíritu del personaje. Malas, generalmente por parte de la timidez que esta demuestra al intentar afianzarse con mayor coherencia y predictibilidad narrativa en su transcurso, cediendo algo de su históricamente tan característica y despojada de prejuicios, frescura.
Monólogos interminables!
Es como si por momentos el tono absurdo, autoconsciente e irreverente, clásico de The Tick, quisiera mantener una de sus patas adheridas a un cable a tierra, para no ser tan descabellada, mantenerse accesible y así no espantar al público novel. Como si a su clásico estilo le quisiera agregar ciertos ingredientes de realismo y gradualismo en cuanto a la construcción de su mitología, al modo de Batman Begins o Daredevil. Esto es, presentarnos un mundo más o menos normal, para ir de a poco regando miguitas de pan que nos lleven hasta la paródica cueva de absurdo total que es el universo de La Garrapata. Trueca frescura y riesgo por cierta inestabilidad en cuanto a su propósito y una actitud más conservadora, logrando así un programa que parece tener destellos muy buenos por momentos, pero con movimientos que en general parecen algo toscos y forzados.
Lo mejor va a pasar por el casteo de sus figuras principales. El gran Peter Serafinowicz parece ser el actor ideal para encarnar con gran presencia y amplia nobleza los discursos totalmente imposibles de The Tick. Muy carismático, logra atraer totalmente la atención, estando a la altura del personaje. Por su parte, Arthur está muy bien representado por un tal Griffin Newman quien, con su simpatía y rasgos de vulnerabilidad, demuestra una gran capacidad de generarnos empatía. Teniendo el gran desafío de ser alguien a partir de quien se construye la historia (ya que The Tick está ahí para romper todo mientras que Arthur siempre nos sirve de apoyo de persona más o menos normal que puede ir notando como todo se desmadra a cada paso de su compañero) logra asentarse muy bien en el episodio, algo que siendo lo único sutil de la serie, no es nada sencillo.
Lo mejor argumentalmente entonces, pasará por lo esperable de la franquicia: momentos de resoluciones sorprendentes, impredecibles y desvergonzadas. Lo peor, esta suerte de vergüenza que la construcción de la historia tiene, por momentos luciendo a destiempo respecto a ciertas escenas o diálogos perdiendo cierta fluidez narrativa y resultando algo forzada.
No estás loco Arthur, sólo eres una persona cuerda en un mundo de locos!
En resumen: el reboot de The Tick enmarcado en esta era superheroica por la que pasan el cine y las series parece super lógico y adecuado. Además, la pantalla On Demand de Amazon es un lugar diferencial respecto a la televisión abierta, siendo ideal para correr ciertos riesgos. Con bastantes cosas por pulir en cuanto a fluidez y audacia, pero también con cosas muy interesantes a desarrollar, si estas se logran explotar en el mediano plazo de una tirada de episodios de una temporada y de la mano del gran casting que se hizo con sus dos actores principales: la serie puede tener un gran futuro. Ojalá que así sea entendiendo que The Tick, es un gran personaje para poder ser explotado.
Por Lautaro Olivera
